Mientras se construye una estrategia se hace con la confianza y la convicción de que se está haciendo lo mejor y que el resultado será un éxito para la empresa. Para lograr la mejor ruta es necesario seguir una metodología que consolide el proceso y los resultados de la estrategia. Te propongo un checklist que te ayudará a encontrar lo que pudiera estar mal en la estrategia.
- Asegúrate que la estrategia se enfoque en el aspecto clave para el futuro de la organización y después revisa que los objetivos sean claros y reflejen esa meta en la realidad del día con día.
- Verifica que el análisis externo o del medio ambiente esté actualizado y comprenda todos los factores importantes.
- Asegúrate que el análisis interno considere las perspectivas e intereses de todos los interesados (stake holders) y que todos estén involucrados en el proceso.
- Comprueba que las estrategias diseñadas puedan ser realizadas con las habilidades y recursos disponibles en la organización.
- La ejecución de la estrategia exige recursos (humanos, financieros, tecnológicos) es necesario examinar que estén disponibles y que se asignen eficiente y efectivamente.
- La estrategia implica riesgos potenciales por lo que hay que comprobar que son entendidos y que se pueden mitigar adecuadamente.
- Métricas KPIs. Examina cuáles fueron seleccionadas para medir el avance de la implementación y comprueba si son correctos.
- La estrategia debe ser clara y bien comunicada, asegura que la organización esté alineada en torno a esta estrategia.
- Finalmente, la estrategia y su implementación dependen de que los roles y responsabilidades estén claros para cada elemento de su proceso.
Si aplicamos metódicamente un estudio como lo anterior, aumentaremos la probabilidad de que la estrategia sea exitosa.
Y tú, ¿cómo te aseguras de que tu estrategia es la mejor?